Peeling médico
El peeling o exfoliación es un acto médico mediante el cual se busca eliminar capas de la epidermis a mayor o menor profundidad en función del o de los agentes exfoliantes utilizados. El peeling químico consiste, pues, en la aplicación sobre la piel de una o más sustancias químicas que provocan una destrucción controlada de los estratos epidérmicos con la consecuente descamación debida a la aceleración del recambio celular, y la posterior regeneración epidérmica, así como de la reparación de la dermis con la formación de nuevo colágeno.
En nuestro arsenal terapéutico disponemos de distintos tipos de peelings que nos permiten optimizar el resultado con el menor trastorno o inconveniente para el paciente. Las mejores indicaciones de los peelings son el fotoenvejecimiento cutáneo, el acné, el melasma o manchas faciales, la dermatitis seborreica y todas aquellas situaciones que requieran un incremento del recambio celular. La combinación del uso de peelings con otras técnicas como la mesoterapia rejuvenecedora, bioestimulación con plasma rico en plaquetas o la aplicación de neuromoduladores contribuye al mantenimiento de los resultados obtenidos.
La importancia del uso continuado del peeling está en aclarar las manchas solares, seniles, melasmas y cloasmas y evitar su aparición o posterior hiperpigmentación en los períodos de exposición solar. No solo se trata de un protocolo despigmentante, sino de un tratamiento que regula la actividad del melanocito y la tirosina evitando posteriores pigmentaciones durante la exposición solar.
En Aurea Phi aplicamos diferentes tratamientos, según el tipo de piel, sobre la superficie cutánea con la finalidad de producir una renovación de las capas superficiales de la piel. Con ello se propicia una descamación suave de la epidermis y se promueve la formación de nuevo colágeno y fibras propias de la piel, así como la inhibición de la síntesis de tirosina lo disminuye la melanina.
Podemos destacar como despigmentantes el ácido tranexámico, ácido ferúlico y el dispositivo médico-estético PRX-T33®.
Con estos nuevos ácidos nanosomados conseguimos estimular la dermis sin agredir la epidermis, de manera no ablativa y sin exfoliarla prácticamente, pudiéndose realizar el tratamiento en cualquier época del año con la mayoría de ellos.
Nuestro tratamiento de peeling facial con ácido salicílico es el exfoliante perfecto para cuidar y depurar tu cutis, con el que podrás darle un cuidado extra a tu dermis. Además, con este tratamiento médico-estético podrás borrar arrugas de pequeño o mediano calibre.
El peeling de ácido salicílico es un tipo de peeling químico superficial especialmente indicado para pieles grasas y con acné.
Este tipo de peeling tiene una acción antiséptica y contiene propiedades antimicrobianas que permiten la limpieza de poros en cualquier tipo de rostro, evitando así la aparición de posteriores infecciones, por lo que resulta muy útil para problemas de acné. Y, si sufres rosácea, dermatitis o tienes una piel sensible, este peeling es el más adecuado para ti ya que es el menos abrasivo de todos.
El Fenol es un ácido agresivo utilizado para realizar peelings medios, con el objetivo de mejorar la piel con fotoenvejecimiento severo, arrugas acentuadas, cicatrices importantes o etapas iniciales de lesiones cancerosas de la piel.
Es fundamental realizar un diagnóstico previo adecuado a la hora de indicar un peeling químico. En el caso de un peeling de fenol sería una piel severamente fotoenvejecida, con manchas solares, cicatrices de acné importantes, surcos y arrugas profundas. Además, estaría más indicado en pieles finas y claras.
El beneficio fundamental es que nos permite alcanzar las capas más profundas de la piel, produciendo una exfoliación cutánea importante que causa una regeneración del colágeno. Así permitimos que piel nueva se muestre en la superficie de nuestra cara, luciendo más joven, con menos arrugas, con un tono uniforme y una textura homogénea.
Preguntas frecuentes sobre el Peeling químico
¿Qué es un peeling?
El peeling químico es una técnica utilizada para mejorar el aspecto del cutis. Consiste en la eliminación de distintas capas de la epidermis mediante la aplicación de un agente químico irritante. Esto produce una renovación de las capas de la piel siendo sustituidas por otras nuevas de mejor calidad, con menos manchas y arrugas y mejor textura.
¿Cuáles son los tipos de peelings?
El peeling puede ser físico o químico, y según el agente utilizado se obtienen distintos beneficios. Entre ellos el aumento del colágeno que mejora las arrugas, despigmentación de manchas o el control sobre la grasa y bacterias en las pieles acneicas.
¿Para qué se usan los peelings?
Se usan para mejorar el aspecto de la piel dañada por el sol, para la rosácea, disminuir arrugas, mejorar las cicatrices de acné o varicela y decolorar o eliminar manchas. Dependiendo del poder de penetración de la sustancia química se eliminarán más capas de piel. A mayor profundidad, mayores efectos pero también más riesgos. Aunque el peeling está indicado en casos de envejecimiento fisiológico o solar y para el tratamiento de manchas y acné, también puede emplearse como un medio para “mantener una piel sana, tersa, libre de impurezas y luminosa”.
¿Qué sustancias se emplean para los peelings?
Entre las sustancias empleadas en el peeling se encuentran los ácidos glicólico, tricloracético, salicílico, mandélico… La elección de estas sustancias dependerá del objetivo del tratamiento (despigmentante, antiacneico o antiarrugas). En todo caso se consigue mejorar la calidad de la piel y la producción de colágeno y elastina.
¿Cuántos tipos de peelings químicos existen?
Hay 3 tipos de peeling según la profundidad de su efecto:
- Peeling superficial: Cierra los poros, atenúa las cicatrices originadas por el acné y las arrugas finas. Además, aporta uniformidad al tono de la piel y un aspecto más juvenil y saludable. Este tipo de peeling ayuda a controlar el acné, las foliculitis y las secreciones sebáceas, y pone a la piel en mejores condiciones para recibir cualquier tipo de tratamiento dermatológico. Los peelings superficiales se realizan fundamentalmente con alfa-hidroxiácidos (ácido glicólico), ácido tricloroacético (10-15).
- Peeling medio: está indicado en el caso de envejecimiento solar o tóxico ya que actúa sobre las arrugas finas y de profundidad media y para controlar las manchas producidas por el sol. También se emplea como paso previo o complemento de muchos tratamientos como la microdermoabrasión, lifting o rellenos. Para los peelings medios se emplean mascarillas de ácido tricloroacético al 11 y 16%, la solución de ácido tricloroacético del 35% al 50% o la solución del fenol al 88%.
- Peeling profundo: Con resultados espectaculares, el peeling profundo consigue actuar sobre las arrugas superficiales, medias y profundas, eliminar manchas solares y queratosis. Asimismo, produce la retracción de la piel, lo que ayuda a mejorar notablemente los problemas de flaccidez. El más empleado es la solución de Baker-Gordon a base de fenol.
¿Cuál es el peeling más indicado para mi caso?
Los peelings químicos superficiales y medios se realizan en la consulta de forma ambulatoria requiriéndose ingreso de 3-4 días sólo en algunos casos de peelings profundos. La profundidad del peeling determinará la recuperación de la piel, que puede ir desde unas pocas horas hasta cinco días aproximadamente.
¿Cuáles son las indicaciones más importantes antes de realizar el peeling?
- Avisar a su médico en caso de que esté embarazada o pueda estarlo así como en caso de que realice lactancia materna.
- Advertir del uso de cremas de ácido retinoico no prescritas por su dermatólogo o de la realización previa de peelings, implantes, inyección de toxina botulínica, maquillaje permanente o cirugía reciente.
- Si ha empleado isotretinoína oral en los últimos 6 meses, debe de esperar para la realización del peeling ya que pueden aparecer efectos indeseables.
- En caso de que haya sufrido un herpes en las últimas dos semanas o de que presente historia de herpes de repetición debe de advertirlo ya que el peeling puede provocar una reactivación del mismo en caso de que no se prevenga.
- Antes de la realización del peeling debe evitar el uso de rayos UVA o exposiciones extensas al sol.
- Avisar de los fármacos que esté utilizando antes de realizar el peeling.
- Es recomendable evitar en la semana previa a la realización del peeling la realización de limpiezas de cutis, uso de esponjas abrasivas o depilaciones.
¿Cuánto tiempo dura la aplicación del peeling?
Depende de la extensión tratada y de la sustancia empleada. Varía entre 10 minutos y 2 horas.
¿Cada cuánto tiempo debe de hacerse un peeling?
La periodicidad del peeling también dependerá del objetivo del tratamiento así como de la sustancia empleada. En los peelings para aportar luminosidad al rostro se realizan entre cuatro y ocho sesiones semanales o quincenales. Una vez obtenidos los resultados deseados se hace una sesión de mantenimiento cada cuatro o seis semanas. Cuando la intervención en la piel es profunda, las sesiones se espacian más en el tiempo y el tratamiento completo se repite una vez al año. Si el peeling es muy profundo no suele repetirse en años.
¿Cuál es la sensación que se nota al hacerse un peeling?
Durante el procedimiento se puede notar una leve sensación de picor más intensa cuanto más profundo sea el peeling. De forma excepcional puede aparecer lagrimeo, enrojecimiento, inflamación y costras.
¿Qué debe de hacerse después del peeling?
Después del tratamiento la higiene es inexcusable, es imprescindible la protección solar y evitar la exposición directa al sol. Cada paciente contará con un tratamiento personalizado, que puede ir desde la aplicación de cremas hasta complementos dietéticos, para mejorar el problema específico que presenta su piel. Debe seguir los consejos de su dermatólogo para evitar infecciones bacterianas, herpes, cicatrices, alteraciones de la pigmentación y alergias. En caso de que quiera maquillarse es recomendable esperar al menos 30 minutos después del peeling para que el pH de la piel se normalize. Tampoco se debe exponer a calor, saunas o realizar ejercicios físicos hasta la semana siguiente a la realización del peeling.
¿Se puede hacer vida normal después de un peeling?
En los peelings superficiales el paciente presenta una reacción similar a una quemadura solar que desaparece en 3-4 días. En el caso del peeling medio la reacción dura entre 7 y 10 días. Tras el tratamiento el paciente presentará un enrojecimiento y descamación de la piel, más intensos y duraderos cuanto más profundo sea el peeling.
¿Cuáles son los efectos que cabe esperar después de un peeling?
La mejoría de la piel se nota después en 1 o 2 días con los peelings más suaves hasta 1 mes con los más intensos. El enrojecimiento cutáneo con los peelings profundos puede durar hasta 6 meses.
¿Cuáles son las complicaciones del peeling?
Son excepcionales pero pueden verse en casos muy raros reactivación de herpes latente, eritema persistente, eritema seborreico, eritema rayado en los casos de peeling con resorcinol, quemaduras, hiperpigmentación postinflamatoria, aclaración del color de la piel, infección, cicatrices, erupciones acneiformes, descamación o reacciones alérgicas por resorcinol.
¿Cuánto duran los resultados del peeling?
El número de tratamientos necesarios dependerá de la respuesta del paciente y del tipo de peeling aplicado. En los peelings medios una única aplicación es suficiente para apreciar cambios significativos. A mayor profundidad del peeling, mayor duración de los resultados, sin olvidar que el proceso de envejecimiento seguirá su curso.